Spiderman.

Querid@s mi@s,

Hoy por peticion de mi carnicero favorito os escribo esta entrada. En ella, voy a escribir acerca de uno de mis dos gatos, Spiderman.

Spiderman es el mas pequeño de mi gran familia. Su nombre se lo puso mi hijo mayor, es lo que tiene tener niños pequeños. Es un gatito encantador y desde el primer momento que lo conocimos nos enamoramos de el. Spiderman nació en mi casa de campo en una camada creo de 5 gatitos. Creo que fueron 5 gatitos porque fue lo que yo vi. Eran 3 negros y 2 grises, todos preciosos y especiales. Su mama es una gata que pasea por la zona y decidió refugiar a sus bebes en mi leñero.

Mi leñero es amplio y adecuado para refugiarse del frio y de las amenazas que les puedan acechar. Ya sabéis, los gatos de campo tienen que sobrevivir a diferentes riesgos que se les puede presentar en cualquier momento. Zorros que bajan del monte, frio, lluvia, diversos animales salvajes, etc.

La primera vez que lo vi fue un día que abrían la acequia de la zona para regar los campos de la zona. Fui  a mi casa de campo para ver que todo se regaba correctamente cuando de repente oi a mi perra ladrando insistentemente hacia mi leñero. Como no paraba fui a echar un vistazo y me di cuenta que había debajo de un pallet 5 gatitos. Cada uno de ellos me cabían en la palma de la mano, eran una autentica monada. Estaban asustados por mi perra y se refugiaron donde pudieron pero cuando levante el pallet e intente coger a uno de ellos escaparon todos lo más rápido posible. Pude coger uno de ellos pero lucho con todas sus fuerzas y a pesar de tener apenas 1 mes pudo escaparse de entre mis manos. No cualquiera se habría atrevido a coger a uno de ellos ya que este que cogí lucho mordiendo, bufando y arañando con todas sus fuerzas.  

Tras ese intento de coger a uno desistí ya que se habían ido todos a esconderse. Así que decidí seguir a mi faena, cuando de repente mi perra volvió a ladrar. Cuando volví a acercarme a ver lo que sucedida estaba Spiderman enganchado a una parra como podía, ya que medio cuerpo colgaba al aire y la boca de mi perra estaba debajo de el. En sus ojos vi como temía por su vida ya que si caía seguramente fuera capturado por mi perra. Fui a casa corriendo y cogí un guante para poder ayudarle ya que teniendo el antecedente anterior sabia que posiblemente me iba a atacar apesar de estar ayudandole. De primeras se dejo ayudar (tenia más que perder que ganar) pero cuando vio que ya estaba a salvo con un movimiento brusco se retorcido y salto de entre mis manos. En que aterrizo en el suelo se fue corriendo. ¡Que granuja! Corrió delante de mi perra que iba a su caza con tan mala suerte que cayo a la acequia. Ohhh dios mío, pensé que de ahí no salía. empezo a nadar como un campeón pero al cabo de pocos segundos desaparecio a una zona que no habia visibilidad. Aunque no lo veia le oia como maullaba asi que alerte a mi vecina la cual vino corriendo y como pudimos mi vecina y entre las dos lo saquemos de sonde estaba. Cuando lo cogí después de todo el suceso el gato estaba muy mojado. Me quite mi camiseta y lo enrolle en ella. Spiderman empezo a ronronear y se me quedo dormidito. Estaba muy cansado y exhaustivo. Ya no quería luchar solo necesitaba que lo cuidaran menudo susto llevaba el pobre. Imaginaros mi cara con un cachorrito de tal calibre, tan pequeñito y tan mono ronroneando dormido en mi mano.

Lo metí en mi casa de campo y se me ocurrió hacerle una videollamada a mis hijos con el gatito y hazte seguido ya sabéis lo que paso. Un miembro mas de mi familia y para ser exacto es el pequeñin. 

Se ha convertido en el más pequeño de casa a pesar de ya casi tiene un año. Nos llena de alegría con sus juegos y es adorable. Aquí tenéis unas fotos actuales de nuestro gatito Spiderman.

Daniela y Sergio, mis hijos, estan encantados desde que entre con el por nuestra casa de la ciudad. Muchos juegos y vivencias con el gato ya que desde el principio Spiderman a participado en todos los juegos con mis hij@s. Recuerdo por ejemplo como se metia el solo en el carro de las muñecas para que mi hija lo paseara y se quedara dormido o cuando se metia en el camion de mi hijo y el lo pasea por toda el piso. 

Momentos unicos, momentos de amor, momentos imborrables que nos ha regalo el pequeñin de la casa.

La relacion con mi otro gato, Mitsubishi desde el tercer dia ha sido como amor de padre e hijo. Eso si, los dos primero días Mitsubishi se enfado mucho y le marco el territorio como diciéndole esta casa es mía. Después de esos dos días ha sido como un amor filial. Juegan y se quieren diariamente.

Y es que vivir con animales domésticos es de lo mejor. Te regalan amor incondicional, amor animal y siempre, siempre vienen a buscarte a la puerta. En mi casa, como ya sabéis, tengo  dos gatos y una perra y cuando no viene uno u otro vienen los tres a saludarte cuando entras por la puerta de casa.

Así que Juan Carlos ( si, si... es mi carnicero favorito) anímate y mete en tu vida a uno o dos gatos.

Amor animal forever.

Con mucho cariño animal,

Cristina.